Hay un momento al comenzar el anochecer en el que reina el silencio. Entonces, se siente tan de cerca la calma que crea expectación. Es el momento de cerrar los ojos y abrirse para empezar a notar el susurro del viento que sale del bosque para ulular en el alma. Es la oscuridad natural que libera. La "enlatada" me asfixia. Por eso, por favor, deja unas rendijas para que entre la luz.

jueves, 7 de agosto de 2008

LA LETRA DE UNA CANCIÓN


Siempre creyó en el poder de la música, y aquella canción, tantas veces oída hace bastante tiempo, la estaba despertando.

El lenguaje musical era el único que no se le vacíaba de tanto usarlo; los demás sí, se le licuaban hasta no decirle absolutamente nada. ¡Qué huecas se le habían vuelto algunas palabras¡

Con aquella melodía estaba tomando conciencia física de su existencia. Aunque así dicho -otra vez la vacuidad de las palabras- pueda parecer una perogrullada.

Se palpó los ojos: con ellos había podido disfrutar de aquel rostro hermoso, esa mañana; deleitarse en su contemplación desde la distancia. Se estaba aficionando a escrutar facciones agraciadas cuando se las mostraba la belleza. Se sorprendía de lo estimulante que resulta lo atractivo

Y sus oídos: le habían permitido escuchar el dolor ajeno, y sentirse congénere en la compasión, y reconciliarse por un momento con aquella alma en pena, que se estaba comportando con dignidad y resultaba serena. Los ecos de la serenidad en sus oídos; se afanaba en registrarlos, que formaran parte de su banco de sonidos, para cuando le fueran necesarios.

También se tentó la boca y le emocionó lo que le permitía expresar....A veces comunicaba....y cuando este fenómeno es exitoso se produce una comunión: con el mundo de los significados que se alojan en el cerebro propulsados desde el corazón -aunque últimamente pensaba más que desde el vientre, dos dedos debajo del ombligo- y una comunión también con el universo de la boca que se tiene enfrente, en ese momento cerrada, pero dispuesta a abrirse, cuando sea su ocasión.

Con la letra de aquella canción, celebraba que ¡¡¡ESTABA VIVA¡¡¡¡¡

1 comentario:

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

Qué bien que existe la música para darnos esas palabras que tantas veces nos faltan.

Besos